Cualquier persona que haya trabajado en publicidad o mercadeo, alguna vez ha llegado a tener una idea que considera grandiosa
e innovadora. Lastimosamente, después de tantos años, muchas cosas ya se han hecho y siempre hay un “Cretino”, que conoce tanto
de publicidad, que siente satisfacción al decirnos que nuestra idea ya se hizo.