Serie "El Hilo Rojo", inspirada en la leyenda oriental la cual cuenta que entre dos o más personas que están destinadas a tener un lazo afectivo existe un hilo rojo, que viene con ellas desde su nacimiento atado al meñique de cada uno. Este hilo puede estirarse, enredarse y cruzarse con otros hilos, pero jamás se rompe.
La serie de collage se basa en las manos, que son nuestros instrumentos más preciados para crear y amar, son como las alas de los pájaros.
Cada collage va acompañado de un pequeño texto.
Tengo cierta fascinación con las manos, son nuestros instrumentos más valiosos, con ellas creamos, amamos, decimos, somos,
son nuestras alas, y aún así, se las entregamos a otra persona sin dudar.
Sentir el pulso ajeno, sentir como aumenta el pulso propio y se sincroniza para formar un solo corazón, un solo sentimiento,
a punto de volar.
Confianza. Sentir tanta seguridad que entregamos nuestra mano al otro y caminamos en sincronía de pasos y alma, sin temer la noche,
el camino, los problemas... porque tenemos otra mano que nos guía y otra alma que nos cuida.
Ser. Somos. Dos seres siendo. Únicos. Tan opuestos y tan iguales, somos fortalezas, somos debilidades, somos un conjunto de errores
y aciertos que nos colocó aquí, juntos, siendo.
Compartamos un instante, te regalo mi tiempo y mi espacio. No hay necesidad de hablar, solo siente lo que mi alma grita. Sintamos, sin límites ni preguntas. Que en esta vida efímera no hay lugar más feliz que entre tus manos.
Y no importa si tienes las alas rotas, aprenderemos a caminar. No importa si en ti hay sombra, significa que en algún lugar hay luz. Seamos como somos, positivo y negativo, en blanco y negro y todos los grises, con fuerza y debilidad. Lo único que importa es ser. Seamos.
Gracias ♥
