El proyecto se emplaza en un punto clave del Centro del Lima, la Plaza de la Democracia, un espacio nacido a partir de un atentado contra el edificio que se erigía en sobre ese terreno: el Banco de la Nación. Un atentado que además se realizó durante una protesta pacífica contra la dictadura y que por ello le da a la plaza un valor especial en la memoria de la ciudad. Sin embargo, esta plaza, con un fuerte valor conmemorativo y ubicada a la espalda de la Plaza San Martín, de gran atracción turística y comercial, se encuentra enrejada, es poco utilizada, no tiene usos atractivos a sus alrededores e incluso rompe con el perfil urbano del centro al generarse un vacío forzado que deja ver elementos que no estaban preparados para ser vistos.
Por otro lado, el contexto de esta plaza se ha venido transformando, principalmente con la construcción de una estación del Metropolitano adyacente a ella. Este medio de transporte, genera nuevas potencialidades al ser un sistema de llegada al centro que a la vez le da un nuevo orden.
Por estos motivos, consideramos la Plaza de la Democracia un espacio con gran potencial para la creación de un equipamiento urbano que permita generar dinamismo en la zona, incluyéndola en las distintas dinámicas que se producen en el Centro de Lima e integrándolas.
Como respuesta, planteamos un equipamiento híbrido Cultural-Residencial, de manera que este espacio conmemorativo se transforme en un espacio activo de valor cultural, generador de conocimiento e identidad, que sea a la vez ícono de modernidad y portada al Centro Histórico desde el Metropolitano, y cuyo dinamismo, tanto en el día como en la noche, promueva la regeneración urbana de la zona y la revalorización del centro Histórico.
Vista fotomontada desde la llegada del Metropolitano, hacia el espacio publico hundido.
Cátedra: Arq. Carlos Díaz Mantilla
Arq. Manuel Flores Caballero
Arq. Alberto Ishiyama Nieto
Arq. Julio Navarro
