Dos palabras se unen para formar una nueva forma de decir. ErrorDescomposición es un nombre que genera cierta alarma, y vinculado a exhibir, es decidir mostrar una parte del proceso artístico que aunque no sea la más cómoda, es acaso la más intere- sante. El momento de romper, de dejar morir a una idea, generar una trama hecha de todo lo oscuro y desconocido, de lo “feo” , lo sucio y lo nuevo, solo porque es real; esta es la trama que compone la evolución de un trabajo.
Frente al error hay algo que perece, hay algo que se descompone y se transforma, a través de ese proceso, en una nueva posibilidad. Y en ese proceso que es raro o difícil, aparece la singularidad, la alternativa, el camino que no hubiésemos tomado.
Este trabajo de Guido Corallo supone rupturas a distintos niveles: con el objetivo de abandonar la regularidad y quebrar el orden simétrico, surge la experimentación en busca de lo peculiar, la necesidad de traspasar los límites de su disciplina, de descubrir el lirismo fuera de los resultados, de encontrar resultados en otros puntos del proceso.
Así, el error digital y el error humano se unen como agentes para descomponer estructuras preestablecidas en los procesos personales, descomponen incluso las categorías que en vano los anidaban para ser simplemente singularidades en la experiencia, la sublime poética de la deformidad.
Corallo es un artista programador, funciones matemáticas, códigos y algoritmos, son la verdadera estructura de lo que podemos apreciar con nuestros ojos como imágenes, el esqueleto de su producción visual. Para esta muestra buscamos dejar esto al descubierto de la forma más íntima posible, ampliando la utilización de los recursos a diferentes herramientas y disciplinas.
Merlina Rañi
