El mundo se ha volcado a las pantallas de los celulares inteligentes, vivimos pendientes de un rectángulo brillante del tamaño de nuestra mano donde caben todas las imágenes existentes en el planeta. Las imágenes ahora se pueden llevar en el bolsillo. El arte se ha rebajado a estas márgenes digitales, ha bajado de su pedestal y ha perdido su gloria y grandeza (física y espiritualmente) para introducirse en estos dispositivos, la experiencia visual se ve interrumpida por un dedo explorando la pantalla, la experiencia estética se ve sesgada y la obra pierde por completo su espíritu. Por alguna razón seguimos yendo a los museos.
Fragmento de "La Creación de Adán" [Miguel Ángel] · Acuarela · 11,5 x 5,9 cm
Fragmento de "Guernica" [Pablo Picasso] · Acuarela · 11,5 x 5,9 cm
Fragmento de "La Mona Lisa" [Leonardo Da Vinci] · 11,5 x 5,9 cm
Fragmento de "El Grito" [Edvard Munch] · Acuarela · 11,5 x 5,9 cm
Fragmento de "La Última Cena" [Leonardo Da Vinci] · Acuarela · 11,5 x 5,9 cm
Fragmento de "El Nacimiento de Venus" [Botticelli] · Acuarela · 11,5 x 5,9 cm
Fragmento de "La Chica del Arete de Perla" [Vermeer] · Acuarela · 11,5 x 5,9 cm
