El diseño de interiores se centró en reorganizar funcionalmente el espacio y establecer un orden en el estilo y mobiliario.

Se buscó dar carácter a las diferentes áreas que componen la planta baja, como el hall/recibidor/sala de trabajo, la cocina comedor y el living. El enfoque funcional incluyó la sectorización de espacios que se encontraban residuales o sin uso. 

Estéticamente se buscó un estilo elegante, sobrio y moderno, utilizando colores y mobiliario contemporáneo para revitalizar el ambiente.Se emplearon tonos cálidos, maderas claras, plantas de interior y textiles para añadir calidez a la vivienda.

A través del color delimitamos áreas dentro de un mismo espacio. Con este recurso del color también se generan destaques, como es la pared del estar donde se cuelga la TV, que se plantea como punto focal y se acentúa con un empapelado en tonos grises, que al mismo tiempo aporta profundidad al ambiente.