El proyecto se originó en la técnica del moldeado que permitió explorar las profundidades y posibilidades del material cerámico y la exploración del mismo para llegar al resultado final de la pieza. 

El proyecto es una pieza estereotómica caracterizada por la incorporación de agujeros estratégicamente diseñados. Estos agujeros permiten una interacción con la luz y añade dinamismo a la pieza, realzando su belleza de crear juegos de sombras y reflejos y resaltando la profundidad de la escultura estereotómica. 

Los colores de esta pieza fueron seleccionados con precisión y estrategia. Opté por una paleta de colores neutros con la intención de resaltar la belleza natural de la arcilla, más allá de la simple estética. Esta selección permitió que el material cobrara vida y aportara una sensación de autenticidad y conexión con la tierra.