Flores y café
Desde hace 50 años José Octavio y María Nidia se levantan muy temprano, para ejercer su labor de campesinos, la cual aprecian y de la que se sienten orgullosos (se puede notar en sus rostros); es gracias a esto que han logrado salir adelante y cuidar a su nieto de 9 años.
José Octavio mantiene su finca en buen estado, se encarga de cosechar, procesar y luego vender el café que el mismo ha sembrado; también siembra algunas matas de plátano, yuca, entre otras plantas que gracias al clima del sector crecen con gran facilidad. Es un hombre al que no le gusta estar sentado haciendo nada, pues siempre le quiere estar ocupado mientras se trate de mantener su finca de la mejor manera que se pueda.
María Nidia, su esposa, se encarga de los oficios caseros; aunque también le gusta cooperar con los gastos de su hogar, para esto se ha conseguido un dinero extra que invirtió en unos pequeños pollos y que en un futuro piensa revender; una de sus mayores pasiones son las flores que cuida como si fueran parte de la familia y por esto ha logrado tener uno de los mejores jardines de la vereda.
Aunque algunas veces han pasado crisis económicas, los dos juntos se las han arreglado para levantarse y seguir adelante, aunque no tengan muchas comodidades tampoco han tenido que aguantar hambre, pues la tierra les ha dado lo que necesitan, así como el gran empeño que le colocan a su trabajo de cada día.
Cafeteros: Jose Octavio y María Nidia
Vereda Guayabal, Risaralda, Colombia
(2010)
