La posibilidad de no ser


A los 23 años de edad, mi mamá quedó embarazada. Esto no fue una situación planeada. Tanto mi papá como mi mamá apenas se encontraban en mitad de su carrera profesional, por lo que tener un hijo hubiera sido una gran dificultad profesional y económica. Las primeras semanas fueron las más difíciles. La ansiedad, el miedo y la incertidumbre conquistaban cada rincón de los pensamientos de mi mamá.
Motivados por el miedo, la incertidumbre, pero también la razón, decidieron tener un aborto. Esto supuso una decisión difícil para mi mamá, no solo porque toda nuestra familia es religiosa, sino porque en ese tiempo el aborto era ilegal, por lo que tocaba hacerlo de manera clandestina. A pesar de todo, el aborto se hizo con éxito.
7 años después nací yo, en circunstancias totalmente diferentes. A pesar de lo que se puede pensar, este ensayo fotográfico no trata acerca de la posible vida del niño que abortaron, sino de la posible desaparición de la mía. Si pensamos en retrospectiva, si hubieran tenido ese hijo, muchas cosas en la actualidad serían extremadamente diferentes. Tanto que seguramente yo nunca hubiera nacido. Por lo menos mi mamá no hubiera podido terminar su carrera profesional, económicamente se hubieran tenido que adaptar a la situación radicalmente, y la vida del niño hubiera sido mucho más difícil. En esencia, el hecho de que hayan decidido no tener ese hijo me permitió a mi tener la vida que tengo. Los privilegios y las oportunidades.
Me imagino mi cuarto totalmente vacío. El plato de comida enfriándose paulatinamente. Mi casa sin mí. Lo que se sentiría mirar fijamente una habitación en dónde nunca existí. Esos pensamientos que viven frágilmente un solo momento, una posibilidad. 
Y si me atrevo a mirar demasiado, puedo ver a mi mamá sacando mis cosas del cuarto. Limpiándolo de cualquier rastro mío.
Más allá de los juicios morales, de lo que está “bien” y “mal”, me propuse ver las cosas que estaban en juego. En esta exploración onírica, me di cuenta de que lo más valioso para mí no era la vida de mi mamá, su carrera o mi nacimiento. Incluso me di cuenta que dejar de existir podría ser un alivio, una solución para los problemas de la vida.
Me di cuenta de que lo que verdaderamente quería mantener, lo que no soportaría perder, son los recuerdos y las experiencias que he vivido. Al pensar que posiblemente no hubiera existido, me pregunto donde quedarían todos esos pequeños momentos que se guardan en los rincones más importantes de mi memoria. El atardecer más lindo, mi primer helado, o cuando salíamos al parque, a tomar el sol.
Al final me doy cuenta lo frágil que es mi realidad. Tan sutil, tan débil que a veces siento que se me escapa de las manos. En esos momentos es cuando me doy cuenta lo afortunado que soy de que seamos nosotros.
Nosotros
Published:

Nosotros

Published:

Creative Fields